La coliflor es una de esas verduras que tienen su apojeo durante el invierno al igual que nuestras naranjas. Hoy te traemos una receta sencilla pero que si tienes peques en casa te va a ayudar a que entren en contacto con esta estupenda verdura y vencer esa reticencia que suelen tener los peques hacia ciertas verduras.
Ingredientes para 4 personas
- 1/2 Kg. de coliflor.
- 1/2 l. de leche.
- 3 cucharadas de queso rallado.
- Pan rallado.
- 2 dientes de ajo
- 3-4 ramitas de perejil.
- Nuez Moscada o ralladura de limón.
- Aceite de oliva
- sal
- pimienta
Preparación
- Separa la coliflor en ramitos, lávalos y cuécelos en la leche ligeramente salada durante 10 minutos, hasta que estén tiernos. Luego escúrrelos bien.
- Calienta 3 cucharadas de aceite en una sartén y dora 1 diente de ajo pelado. Agrega la coliflor y saltéala un par de minutos. Retira el ajo y salpimienta y desmenuza ligeramente aplastando la coliflor con un tenedor.
- Traslada la verdura a un cuenco, espera a que esté templada y agrega 2 huevos y 1 yema previamente batidos, el queso, 2-3 cucharadas de pan rallado, 1 pizca de nuez moscada recién rallada, y el perejil y el ajo restante picados.
- Remueve con varillas manuales hasta incorporar los ingredientes; debe quedar una mezclar compacta. Ve cogiendo forma de bolitas con ella y aplástalas ligeramente.
- Pásalas primero por pan rallado, luego por el huevo y la clara restante batidos y por pan rallado de nuevo.
- Fríelas en abundante aceite bien caliente hasta que estén doraditas por los dos lados.
- Retíralas, déjalas sobre papel de cocina para que absorba el exceso de grasa y sírvelas.
